TURISMO DE EMBALSES: EL LITORAL INTERIOR DE ANDALUCIA

EMBALSES DE ANDALUCÍA, EL LITORAL INTERIOR

El 23 de Junio participamos en las jornadas organizadas por Turismo Interior de la junta de Andalucía, denominadas el Litoral Interior de Andalucía, celebradas en Iznájar.

Las conferencias y debates nos han permitido consolidar algunas ideas que nos surgieron tras los trabajos de catalogación de recursos turísticos de municipio como Colomera o Cuevas de Campo.

Andalucía cuenta con 143 embalses con dimensiones suficientes para la práctica de actividades náuticas y de turismo activo. Embalses distribuidos por toda nuestra geografía, que con una buena gestión, permitirían ofrecer un destino turístico de litoral interior, único en el Mediterráneo.

Es necesario, para lanzar este destino, presentar una oferta complementaria (gastronomía, alojamientos, actividades, paisajes, recursos, equipamientos), de calidad y coordinada. Desde Turismo Interior de Andalucía se está asumiendo este reto, impulsando la creación de un "club de producto" que integre a todas las partes implicadas (administraciones y empresas), denominado "Litoral Interior de Andalucía"

La mayoría de los embalses cumplieron la función de impulsar el desarrollo agrario, conteniendo el éxodo del campo a las ciudades. Pero ahora la receta ha cambiado, es necesario diversificar la economía rural, establecer sistemas sostenibles de producción e incrementar la calidad de vida en todos sus aspectos. Se apunta a nuevas actividades que aporten mayor valor añadido al desarrollo rural: energías renovables, industria agroalimentaria y el turismo rural, entre otras.

El reto de diversificar la economía rural, puede encontrar un apoyo en nuevos usos de los embalses, ahora que el crecimiento de la actividad agroganadera se ha desacelerado. Los embalses aportan valores paisajísticos, naturales, dulficican el clima y pueden ser espacio de actividades. Valores y posibilidades demandadas por los turistas. Actuando como recurso y como infraestructura turística pueden volver a tomar el papel dinamizador del medio agrario que adquirieron en los años 50 y 60 del pasado siglo. Ahora que la actividad agrícola se ha reducido, el turismo y el deporte plantean nuevos usos de la lámina de agua interior: vela, piragüismo, observación de aves, senderismo, pesca, cicloturismo, caza fotográfica o equitación entre otras.

Las principales dificultades para tales usos proceden de un sector privado poco cohesionado y de una administración de aguas, que trabajan con criterios del s XIX. Es necesario que contemplen que unas infraestructuras de este tipo pueden y deben aportar más riqueza al entorno rural que el regadío (que no es poco). Es hora de que se entienda que las empresas que se dedican al turismo o a otra actividad no pueden desarrollarse con plazos en las concesiones administrativas y permisos que están oscilando entre 2 y 4 años.

la necesidad de frenar la expansión del mejillón tigre supone un desafío que se puede resolver impidiendo el uso náutico de los embalses, cuando es viable crear zonas de desinfección en los pantalanes u otros procedimientos aptos para evitar su colonización.

El disfrute del paisaje, la cría de aves, el contacto con la naturaleza, la calidad del agua es incompatible con el abuso de las embarcaciones a motor, en especial con las motos acuáticas, abundantes en embalses como el de Cubillas.

Desde Dinámika, animamos a empresas, administraciones, grupos de desarrollo rural e iniciativas de turismo sostenible a poner en valor este magnifico recurso y a integrar sus esfuerzos en el club de producto "Litoral Interior de Andalucía"

Juan Antonio Castro

Dinámika